Del Mito al Logos
«El mito cuenta una historia sagrada; relata un acontecimiento que ha tenido lugar en el tiempo fabuloso de los comienzos. Es algo así como el relato de una "creación": se narra cómo algo ha sido producido gracias a las hazañas de los seres sobrenaturales. Sirven para revelar los modelos ejemplares de todos los ritos y actividades humanas significativas. Al revivir los mitos religiosamente revelan una verdad o hecho real: que el Mundo, el Hombre y la Vida tienen un origen y una historia sobrenaturales y que esa historia es significativa y ejemplar». (Mircea Eliade, Mito y Realidad).
Los mitos son relatos fantásticos comunes a toda sociedad que explican aspectos de las naturaleza y de la vida. Suelen ser anónimos y tener múltiples versiones. Para que cumplan su función y puedan ser llamados “mito”, debe estar ampliamente difundidos en una sociedad e impregnados en el imaginario colectivo.
Preguntas cómo: ¿Cómo surgió el universo?, ¿Cómo surgió tal costumbre?, ¿Qué hay tras la muerte?, ¿Quiénes inventaron algo como las armas?, ¿Quiénes inventaron la agricultura?, ¿Porqué existe el mal o el dolor?, tuvieron siempre una respuesta mítica.
Hacia los siglos VII y VI a.C. en Grecia, algunos hombres trataron de explicar la realidad sin recurrir a tales relatos míticos. Este modo de explicar la realidad se llamó “Logos”, que significa “razón”.
La diferencia más básica entre la explicación basada en el mito y aquella basada en el logos es que la primera es intuitiva, no discursiva, por medios de uno o varios relatos, mientras que la segunda es discursiva, presentada a través de argumentos que se concatenan en una secuencia coherente.
Al principio esta forma de explicación llamada “logos” fue tosca, pero poco a poco se fue perfeccionando.
Uno de los primeros pasos hacia la explicación racional, es decir, hacia al “logos”, fue dado por el poeta griego Hesíodo, quien en su obra “Teogonía” narra el mito del “Ordenamiento de mundo”. Pero no lo hace como un mero relato fantástico, sino que lo presenta como un proceso natural que, partiendo de 3 principios originarios: Caos, Gea y Eros, da origen a todo lo demás a través de nacimientos sucesivos.
«En primer lugar existió el Caos. Después Gea, la de amplio pecho, sede siempre segura de todos los inmortales que habitan la nevada cumbre del Olimpo. En el fondo de la tierra de anchos caminos existió el tenebroso Tártaro, el infierno. Por último, Eros, el amor, el más hermoso entre los dioses inmortales, que afloja los miembros y cautiva de todos los dioses y todos los hombres el corazón y la sensata voluntad en sus pechos.
Del Caos surgieron Erebo, lugar de tinieblas bajo el suelo, y la negra Noche. De la Noche a se vez nacieron el Éter, lugar de donde sale la luz en la bóveda celeste, y el Día, a los que alumbró preñada en contacto amoroso con Érebo. Gea alumbró primero al estrellado Urano, el cielo, con sus mismas proporciones, para que la contuviera por todas partes y poder ser así sede siempre segura para los felices dioses. También dio a luz a las grandes Montañas, deliciosa morada de diosas, las Ninfas que habitan en los boscosos montes. Ella igualmente parió al estéril piélago de agitadas olas, el Ponto, sin mediar el grato comercio». (Hesíodo, Teogonía)
Los Presocráticos
«La filosofía no nació en calmo retiro, sino en Mileto, el mercado antiguo en que los pueblos del Mediterráneo procedían al cambio de sus mercancías; los más antiguos pensadores no fueron ascetas alejados del mundo, sino hombres distinguidos, curiosos y abiertos al mundo, políticos en parte ». (W. Nestle, Historia del espíritu griego).
La génesis de la naturaleza: la Arjé
Para el pensamiento griego la idea de “creación” era inconcebible. Para ellos, es siempre necesaria la existencia de un principio fundamentalmente material originario a partir de lo cual aparecen o se generan las demás cosas que forman el mundo. Este principio de llama “Arjé”
Así, los primeros pensadores griegos explican las cosas a partir de algo que encuentran dentro de ellas y que las constituye internamente.
¿Y a qué “cosas” se refieren más exactamente? Lo que pretenden conocer y explicar, concretamente, es la “fisis”, es decir, la naturaleza, aquello que vemos alrededor nuestro.
Los presocráticos están convencidos de que la fisis está conformada por un arjé, sea este único o múltiple. Cada filósofo presocrático tendrá su teoría sobre cuál es la “arjé” que forma la naturaleza que observamos.
De este modo, para los presocráticos, desde el principio hay una dualidad: aquello que permanece igual, representado por la “arjé”, como sustrato de todo lo existente, y aquello que es formado y se muestra de múltiples formas, la “fisis”, es decir, la naturaleza..
Heráclito de Efeso
La frase que resume el pensamiento de Heráclito era Πάντα ῥεῖ (Panta rei), es decir. “Todo cambia”.
Heráclito valora los sentidos (son buenos para conocer la realidad), pero estos no son suficientes. El verdadero y completo conocimiento se alcanza por la razón.
Heráclito razona de la siguiente forma, preguntándose: ¿Qué me dicen mis sentidos?
Y se responde: “Nadie entra a un mismo rió dos veces”. Esta frase quiere decir que nada es estable, todo cambia. Ya que si te metes al río a las 3:00 y sales y te metes después a las 3:04 ya cambió, ya que hay nueva agua donde entraste, es decir, ya pasó, ya ha cambiado. También nos dice que la Φυσις (fisis), es decir, la naturaleza, es una lucha de contrarios: ser=no ser, estar=no estar, padre=hijo, vivo=muerto (todo tiene un contrario; en un momento estás en un lugar y al segundo cambias de ese lugar entonces ya no estás ,hoy estas vivo al día siguiente mueres; todo cambia).
Ahora bien, luego de ello se pregunta Heráclito: ¿Qué es la naturaleza? ¿Que son todas las cosas? Responde que las cosas son solo un momento del conflicto (entre contrarios). La auténtica realidad esta en una sustancia básica llamada arjé, que en medio del conflicto se diferencia y termina formando toda la fisis; para Heráclito el fuego es el arjé que siempre está en movimiento. La fuerza interna del fuego (arjé) es el conflicto (guerra, etc.). Heráclito dice que el fuego forma todo ya que este está en constante movimiento. La fuerza del conflicto forma la naturaleza. Heráclito afirma que todos los seres son fuego.
Punto de vista: El error básico de Heráclito esta en no admitir como seres las cosas sensibles (Heráclito solo piensa que el ser es el ser).
DEMÓCRITO DE ABDERA
Nació más o menos a la muerte de Heráclito, y como él, creyó en que todo cambia, pero consideraba que debía haber algo estable. Demócrito busca algo estable que esté por debajo de todo.
Propone que el Arjé que constituye toda la realidad es la cantidad geométrica pura, algo que no posee sabor, color, etc; sino que solo tiene tres dimensiones: altura, profundidad, y largo. A esto llamó átomo (indivisible, no tiene partes). El imagina que debe ser así.
¿Cómo es que el átomo forma la naturaleza (fisis)?
La fisis está dividida entre lleno y vacío. El lleno esta conformado por átomos, los cuales son indivisibles, y están en movimiento constante. Los átomos son esencialmente iguales: se diferencian por la forma (A no es igual a N), por el orden (AN no es igual que NA) o por la situación (N no es igual a Z) Los átomos se combinan para formar todo lo que vemos gracias al movimiento y la casualidad. Demócrito identifica al lleno con el ser.
El vacío es lo que divide al lleno, lo que hay entre lleno y lleno. Se identifica con el no ser.
La fuerza del movimiento y la casualidad mueven el Arjé (átomo) y forman la fisis, cuando por el azar se chocan.
Demócrito funda el atomismo, que es considerar que toda la realidad está hecha de fragmentos que se juntan, pero únicamente de esto; y también el mecanicismo, que consiste en percibir la realidad como mera extensión (materia), casualidad y movimiento. El mecanismo es la base de la teoría evolucionista de Darwin.
El atomismo y mecanicismo están emparentados.
“Los principios de todas las cosas son los átomos y el vacío;
todas las cosas son objeto de opiniones.
Las cualidades existen solo por convención;
por naturaleza solo hay átomos y vacío.”
Demócrito,
Para Demócrito todo esto es solo una ilusión, son solo átomos la verdadera realidad.